Así, en La ciudad dormida (1938) presenta una ciudad nocturna, de arquitectura clásica, donde mujeres desnudas deambulan como sonámbulas, representando el mito de la mujer soñada, inalcanzable, camiseta del city 2022 mientras un hombre las mira impotente. Su representación de Jesús no es ya la típica figura barbada de tradición bizantina, sino la efigie de un dios olímpico o de un rey helenístico, más cercana a Alejandro Magno que a un carpintero judío, con una complexión más atlética que la que cabría esperar del místico asceta cristiano.